Sabía UD., que en el cuatricentenario de la Ciudad de Caracas se sucedió en esa ciudad un devastador terremoto? y sabía también que cuando se cumplían 40 años de tan terrible hecho se produjo en Valencia-Venezuela una gran tragedia en un ascensor del IPASME?
A propósito de leer en la web un par de escritos: el primero publicado en la página: spiff-o-rama.blogspot.com, en fecha 23 de Julio de 2007, titulado La Película del Evento , en el cual relata muchos de los acontecimientos: anteriores y posteriores al terremoto que sacudió la Ciudad de Caracas en el año 1967 y el segundo El Ascensor del Horror, publicado por Roberto Echeto, robertoecheto.blogspot.com, en fecha enero 16 de 2008, en la cual describe ; con mucho tino y jococidad, el mundo de los ascensores, sus detalles y los miles de cuentos e historias de las personas que allí transitan en su día a día; es cuando, se me ocurre hacer mi propio espacio para informar y sensibilizar, sobre lo que significa una tragedia dentro de uno de esos aparatos, esto por supuesto, a todo aquel que tenga a bien leer sobre la crónica de un siniestro. Además he creado otro blog: martha´sangels, en esta dirección: angeldejusticia.blogspot.com, para que, mi mamá, todos los familiares, conocidos y amigos de las víctimas, quien lo desee y lo necesite, escriba acerca de el acontecimiento que aquí voy a narrar.
Siguiendo un poco lo expresado en el texto del artículo: La Película del Evento, también deseo relatar los sucesos y situaciones, que rodearon una triste y lacerante historia que acontece, con algunas características resaltantes y coincidentes con el Terremoto de Caracas ocurrido en Julio del año 1967, Esta es la historia:
Mi hermana Martha Waleska de 47a, Docente, madre, hija, hermana y esposa abnegada, ciudadana ejemplar, Docente que dejó huellas por la capacidad y profesionalismo que demostró para educar durante 27 años, y su hija Martha Mayela de 22a, primera de la promoción 2007 en la Escuela de Ingeniería en Telecomunicaciones - Universidad José Antonio Páez, perdieron la vida, casi de forma instantánea, cuando uno de los ascensores, del edificio sede del IPASME Valencia- Carabobo, se desplomó, el día 31 de octubre de 2007, junto a ellas fallecieron también otras cuatro personas.
Siguiendo un poco lo expresado en el texto del artículo: La Película del Evento, también deseo relatar los sucesos y situaciones, que rodearon una triste y lacerante historia que acontece, con algunas características resaltantes y coincidentes con el Terremoto de Caracas ocurrido en Julio del año 1967, Esta es la historia:
Mi hermana Martha Waleska de 47a, Docente, madre, hija, hermana y esposa abnegada, ciudadana ejemplar, Docente que dejó huellas por la capacidad y profesionalismo que demostró para educar durante 27 años, y su hija Martha Mayela de 22a, primera de la promoción 2007 en la Escuela de Ingeniería en Telecomunicaciones - Universidad José Antonio Páez, perdieron la vida, casi de forma instantánea, cuando uno de los ascensores, del edificio sede del IPASME Valencia- Carabobo, se desplomó, el día 31 de octubre de 2007, junto a ellas fallecieron también otras cuatro personas.
Esta tragedia ocurre, cuando se cumplen 40 años de un acontecimiento, sin precedentes, para ese momento, en la historia de mi país, y que dejó huellas muy profundas en la colectividad venezolana.
Veamos: así como el terremoto de 1967, fue vaticinado en el año 1966, por la famosa vidente italiana; Marina Marotti, esta terrible crónica de desdicha que les voy a narrar, también tuvo predicciones sorprendentes, aunque éstas no fuesen realizadas por vidente alguno, sino por profesionales, expertos, quienes alertaron, de manera reiterada, sobre la desgracia que se avecinaba. Cuerpos y otros institutos de seguridad, realizaron inspecciones e informes, posteriormente ratificados en reiteradas ocasiones, pero al igual que en el suceso de hace 40 años, estas "Predicciones" no fueron tomadas en cuenta, lo que es peor aún, ni sucedida la tragedia han sido aceptadas y puestas en práctica. Hace cuarenta años, mi familia y yo vivimos un dolor que nunca pudo sernos ajeno, aún cuando no tuvimos en aquel entonces, pérdidas familiares o materiales, fuimos solidarios con personas, que no sólo perdieron familia, algunos sus hogares, sus pertenencias, sus años de lucha. Hoy cuarenta años después, volvemos a sufrir el peso del dolor, pero esta vez mas profundo, mas lacerante, estamos aún aletargados, cursando cada uno su duelo, no vivimos tratamos de sobrevivir, con las miradas tristes y perdidas, con la esperanza en la promesa de nuestro señor, de volver a reunirnos con Martha y Marthica. Ahora sabemos más de ascensores, de impunidad, de injusticia, tenemos fé, mucha fé, más sin embargo preguntamos a papa Dios: Señor que pasó, como fué?
Y fue sencillo.......
Un edificio: que no cubre los requisitos mínimos de seguridad, e instalaciones sin el debido mantenimiento, para la cantidad de personal Docentes, Empleados y familiares de estos que acuden a diario, a solicitar servicios de Salud.
Uno de los ascensores: adentro: ascensorista, tres docentes y la hija de una de ellas,
en el techo del ascensor: otra persona presuntamente, realizando labores de reparación al aparato.
Veamos: así como el terremoto de 1967, fue vaticinado en el año 1966, por la famosa vidente italiana; Marina Marotti, esta terrible crónica de desdicha que les voy a narrar, también tuvo predicciones sorprendentes, aunque éstas no fuesen realizadas por vidente alguno, sino por profesionales, expertos, quienes alertaron, de manera reiterada, sobre la desgracia que se avecinaba. Cuerpos y otros institutos de seguridad, realizaron inspecciones e informes, posteriormente ratificados en reiteradas ocasiones, pero al igual que en el suceso de hace 40 años, estas "Predicciones" no fueron tomadas en cuenta, lo que es peor aún, ni sucedida la tragedia han sido aceptadas y puestas en práctica. Hace cuarenta años, mi familia y yo vivimos un dolor que nunca pudo sernos ajeno, aún cuando no tuvimos en aquel entonces, pérdidas familiares o materiales, fuimos solidarios con personas, que no sólo perdieron familia, algunos sus hogares, sus pertenencias, sus años de lucha. Hoy cuarenta años después, volvemos a sufrir el peso del dolor, pero esta vez mas profundo, mas lacerante, estamos aún aletargados, cursando cada uno su duelo, no vivimos tratamos de sobrevivir, con las miradas tristes y perdidas, con la esperanza en la promesa de nuestro señor, de volver a reunirnos con Martha y Marthica. Ahora sabemos más de ascensores, de impunidad, de injusticia, tenemos fé, mucha fé, más sin embargo preguntamos a papa Dios: Señor que pasó, como fué?
Y fue sencillo.......
Un edificio: que no cubre los requisitos mínimos de seguridad, e instalaciones sin el debido mantenimiento, para la cantidad de personal Docentes, Empleados y familiares de estos que acuden a diario, a solicitar servicios de Salud.
Uno de los ascensores: adentro: ascensorista, tres docentes y la hija de una de ellas,
en el techo del ascensor: otra persona presuntamente, realizando labores de reparación al aparato.
Un estruendo: un terremoto como el de 1967?????……. No, “ese ascensor” que se desplomó desde el quinto piso,muchas de las personas que estaban en el edificio, pensando que realmente se trataba de un movimiento telúrico de alta intensidad, trataron de bajar por las escaleras de emergencia, porque las otras estaban abarrotadas, lo cual no fue posible por cuanto las puertas de acceso a ellas, se encontraban cerradas con candado, algunos de las personas que tripulaban esa nave siniestra, fallecen al instante, otras posteriormente, pero todos mueren, todas esas maravillosas vidas terminan allí, sucumben ante el horror. La injusticia nuevamente ganó espacio y llamó a su compañera la impunidad... ellas siempre andas juntas.
“Nuestra felicidad se convirtió en lamentos, por causa de la deshonestidad y mala conducta de otros.”
Sé que el lector, estará haciéndose muchas preguntas lógicas; todos nos hemos planteado seguro, las mismas dudas e interrogantes.
No hay respuestas. Porque somos cristianos sabemos que Dios nuestro señor, sabrá cuando y qué contestarnos. Pero quienes en tienen en realidad la capacidad y obligación de dar explicación, no lo han hecho en estos ocho meses, posteriores a la tragedia.
Es obvio que el terremoto de caracas del año 1967, es decir; el contexto natural de semejante catástrofe, era imposible de evitar....pero el siniestro del IPASME de Octubre del año 2007..... sí pudo impedirse, de haberse prevenido los acontecimientos, esta historia no existiría, pero no se prestó atención a las advertencias que hoy no son otra cosa que una triste historia de desgracia....
Es la primera vez que elaboro un blog. Encontre el escrito de spiff-o-rama pues buscaba información relacionada con el terremoto de 1967, viendo fotos, mi hermana menor Jacqui, recordó el hecho y quisimos verificar algunos datos en la internet. No soy escritora, informática, periodista, sólo soy con orgullo: la hermana de Martha, la tía de Marthica, puede Ud., conocerlas en la foto del perfil, mi única pretensión es no permitir, que la muerte de seis personas inocentes, quede en el foso del olvido. Creo que es mí deber informar y concientizar, así como también solicitar apoyo. Los familiares de las víctimas, no hemos logrado que den la cara los responsables por la tragedia del IPASME, aunque esto sea obvio.
Hasta la presente fecha, no hemos obtenido respuestas del ciudadano Ministro de Educación, Directivos del IPASME, Federación Nacional de Maestros y Profesores, Sindicatos u otros gremios, Si Ud., señor lector, puede ayudarnos, agradecemos altamente sus ideas, sus iniciativas, coméntele a conocidos y éstos a otros, quizás así surjan buenas propuestas que nos lleven a conseguir JUSTICIA, para Martha Marthica y las otras cuatro personas fallecidas.